Esa sensación de que no estás 100% completa me lleva persiguiendo una semana. Desde que lo vi subirse a ese bus y tuve que irme porque las lágrimas no me dejaban seguir mirando como se alejaba. Y ahora, que estoy cumpliendo un sueño, que estoy feliz porque estoy haciendo algo que me gusta, me falta compartirlo. Llegar a casa y contar las mini-historias del día a día, detalles sin importancia que te hace ilusión contar. Estoy donde quiero, haciendo lo que me apasiona, pero sigue esa sensación de vacío dentro de mi por no poder abrazarle, acariciarle, sentirlo cerca. 

Contrato firmado, empiezan 8 meses de relación con Skype. Espero que la conexión no se pierda.

Vamos a soñar!

De repente me coge la mano y todo mi mundo cambia. Parece mentira cómo un simple gesto puede desmantelar todos tus planes y expectativas. Y así a lo tonto ya han pasado unas cuantas tardes, mañanas y noches a su lado, muchas lágrimas de alegría y alguna que otra de rabia y tristeza, muchos momentos que enmarcaría para mantenerlos intactos toda la vida. Querer nunca había sido tan fácil, ni alejarse de todo lo que llevaba años queriendo dejar atrás tan duro, pero cuando tienes algo por lo que luchar, que te ilusiona, que te hace la vida más fácil y emocionante no quieres dejarlo ir nunca.

Es el precio de empezar a cumplir un sueño. Todo lo que merece la pena, merece el esfuerzo.

A rascala por ahí

Hoy es un día de esos en los que me siento cansada, hastiada, asqueada, HASTA LOS HUEVOS de todo. Es una frustración pensar que todo fue por nada, tanto esfuerzo, sacrificio, tiempo, desvelos, por nada. Porque parece que todo esfuerzo, no merece la pena. Y da igual lo que digan, que vendrá, tiempo al tiempo, hasta los cojones de darle tiempo al tiempo.

Así que  hoy no estoy para nada ni para nadie. A la mierda ya tanta tontería.

Si me necesitas, grita

Me desarma. No puedo evitarlo, no puedo estar de mal humor si él está conmigo, aunque no esté a mi lado. Suena tonto, estúpido, dramático, absurdo, melodramático, exagerado, infantil, cursi y empalagoso, pero es así.
No sé a quién dar gracias, si al destino, al karma o a la sabiduría, que después de tantos palos me hizo darme cuenta y abrir los ojos de quien merecía la pena, de quien merece el esfuerzo, de quien merece mis risas, mi tiempo, mis preocupaciones, mi cariño, mis besos y mi presente. ¿Quién? El chico bueno, al fin. Leer aquél artículo me terminó de abrir los ojos, de ver a quien tenía delante y dejar caer las malditas murallas de una vez por todas con él, porque hay que arriesgarse, pero con el que demuestra.

Y el que demuestra, cuando estás de mal humor, hastiada, triste, apática, dolorida y cansada, te desarma y te dice "si me necesitas, grita".

Camarero, una de tranquimacin.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHH!! 9 días y estaré a punto de empezar mi primer gran viaje! Vale, estoy eufórica, acojonada y con unas ganas de comerme Madrid que no entran dentro de mi, y por eso, tengo que sacarlas por algún lado. Aún queda un escollo que pasar para ser completamente feliz, pero sé que tarde o temprano lo pasaré y lo aplastaré con toda la rabia y energía que tenga, porque mira que ha tocado los cojones.

Hoy se acaba el año, y pese a todo lo malo, las pérdidas, las despedidas y las patadas en el culo, no fue nada malo. Ya no me gusta hacer balances (que asco les estoy cogiendo), pero este año aprendí muchísimas valiosas lecciones y creo que ha sido el año en el que más he crecido de toda mi vida. No me arrepiento de absolutamente nada de lo que hice, disfruté de cada una de mis locuras como la que más, y a los que me criticaron, me pusieron verde a mis espaldas y dejaron de hablarme por ellas, QUE LES JODAN! Odio a la gente que paga sus frustraciones sexuales con los demás.

Hoy echaré de menos celebrarlo con mis amigos, puta gripe, pero ya habrá tiempo de celebraciones. es una noche más, porque con ellas todas son especiales.

Pues eso, empezaré el 2014 en una ciudad que me encanta, haciendo un trabajo (por 3 semanas cortas pero intensas) que me gustan y seré libre

Saltar

Mareada entre apuntes, resúmenes, esquemas, ejercicios. Volviéndome loca entre un minimundo asqueroso del cual espero deshacerme en una semana. Tras un respiro, me doy cuenta que, con algo (mucha) suerte puede que este sea mi último verano bajo el gris avilesino. No sé qué será de mi, pero lo que sea, espero que no sea aquí. Es como un jarro de agua fría ante el bochorno asqueroso en un (otro más) día gris del verano asturiano. Sienta bien.
Da un poco de vértigo, pero a veces hay que elegir entre el vértigo y el hastío y la monotonía. Y empiezo a cogerle gusto a asomarme a los precipicios.

Fin y principio

Graduación. O semi. Día raro ante todo. Feliz porque es el principio de un futuro un tanto incierto, pero que coges con las mayores ganas del mundo. Triste, porque es un adiós a mucha gente que te ha acompañado durante 4 años, buenos y malos momentos, pero a los que a pesar de todo, les tienes cariño y da pena saber que a la mayoría de gente no volverás a verla. Y sobre todo, la presencia de la ausencia. Su ausencia estaba por todos lados, pero sé que desde donde quiera que esté se sentirá orgulloso de su nieta pequeña, porque poco a poco lo estoy consiguiendo.
No hubo fiesta, al menos para mí, pero tengo la resaca de un día importante, en la que todo sigue igual, pero a la vez todo es diferente.